Ventajas de las puertas rápidas autorreparables

 

En entornos industriales y logísticos, mantener un ritmo de producción constante es fundamental para garantizar la eficiencia y rentabilidad de la empresa. Por eso, los accesos deben facilitar un tránsito fluido de personas, maquinaria y mercancías, mientras sectorizan adecuadamente los espacios según sus necesidades específicas. La intensa actividad en estos ambientes puede provocar pequeñas incidencias, como colisiones con las puertas, que generen averías y paralicen la cadena productiva. Para evitarlo, Ferroflex ha desarrollado una gama de puertas rápidas autorreparables.

Estas puertas están formadas por una lona flexible enrollable, encajada en dos guías laterales. En caso de impacto, por ejemplo, con un toro mecánico, la lona se desplaza fuera de las guías y permite el paso del vehículo. Gracias a un sistema innovador de cremalleras laterales, al enrollarse la puerta, la lona se reintroduce automáticamente en las guías, recuperando su configuración y funcionalidad original. Así, este mecanismo de autorreparación evita paros operativos y costes innecesarios derivados de averías.

Ferroflex ofrece varios modelos autorreparables diseñados para afrontar los retos de distintos entornos industriales.

 

Versatilidad y soluciones adaptadas

Puerta rápida autorreparable: para el tránsito elevado. El modelo más estándar de este tipo de puerta, adecuado para zonas de alto flujo de personas y maquinaria, como áreas de carga y descarga. Ofrecen un alto nivel de estanqueidad y una excelente resistencia al viento. Además, existe una versión con dintel reducido que permite instalar la puerta en accesos de altura limitada.

Puerta rápida autorreparable para zonas de conservación: adaptación al frío. Este modelo está preparado para zonas de conservación de hasta -5 °C e incluye mejoras como un sistema de calefacción autónomo con cable térmico, bastidor inoxidable y protección antihumedad para el freno motor. Una solución resistente y fiable para entornos a baja temperatura.

Puerta rápida autorreparable para aparcamientos: apertura y cierre silenciosos. Pensada para entradas y salidas de vehículos, su funcionamiento rápido y silencioso la hace adecuada para parkings de hoteles y hospitales, entre otros. Está compuesta por una lona de PVC reforzada que contribuye tanto a la seguridad como a la resistencia ante episodios de lluvia o viento.

Puerta rápida autorreparable para supermercados: optimización del espacio. Ideal para separar almacenes de la zona de comercio en supermercados y otros establecimientos del sector retail. La solución permite liberar espacio lateral útil y aprovechar al máximo la superficie de trabajo y almacenamiento disponible.

Puerta rápida autorreparable con cortina cortafuegos EI120: protección contra incendios. El modelo dual que combina la agilidad de una puerta rápida con la protección de una cortina ignífuga certificada EI120. La puerta incorpora dos lonas independientes en un mismo cabezal: una autorreparable para el uso diario y otra ignífuga que se cierra automáticamente en caso de activarse la señal de incendio. La certificación EI120 garantiza el aislamiento efectivo de las llamas y el humo durante un tiempo mínimo de 120 minutos.

Además, todos los modelos pueden personalizarse. Las lonas admiten serigrafías de logotipos, imágenes o señalética, y se les pueden instalar mirillas de distintas formas y tamaños para mejorar la visibilidad y la seguridad. Asimismo, se puede adaptar el color del lacado para integrar la puerta en la estética del espacio, y añadir accesorios como sensores, pulsadores, mandos a distancia o sistemas SAI que aseguran su apertura en caso de fallo eléctrico.